Enrique Romero: El 5 de septiembre celebramos el Día Mundial del Hermano

Existe la celebración de la familia, del día del padre y la madre, incluso los abuelos, por esta razón cada 5 de septiembre se celebra el Día Mundial del Hermano, quien conocemos desde nuestro nacimiento, y con quienes compartimos el mismo techo, vivencias, confidencias, ropas, comidas y mucho más, por ello se celebra esta estrecha relación.

¿Por qué el 5 de septiembre?

La elección del día para celebrar el Día Mundial del Hermano, fue en honor a la Madre Teresa de Calcuta, conocida por todo el mundo por su extensa labor social, y quien falleció el 5 de septiembre de 1997. La Madre Teresa fue una monja católica de origen albanés, naturalizada en India, quien fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad en Calcuta en el año 1950.

Durante más de 45 años dedicó su vida a realizar obras de amor al prójimo en todo el mundo, y  atendió a pobres, enfermos, huérfanos y moribundos, sin ninguna discriminación, encarnando el valor inconmensurable de la fraternidad, al mismo tiempo que  trabajaba constantemente para la expansión de la congregación, inicialmente en la India y luego en el resto del mundo, construyendo refugios y auspicios de salud para los más necesitados.

La Madre Teresa fue una gran defensora de la unión de los hermanos, decía que la vida carecía de sentido si no se vive para los demás, nuestra relación con todas las personas es lo que determina al final el valor de nuestras acciones.

Con su ejemplo dejó un legado que muestra el valor de amar en lo concreto recibiendo al otro como a un hermano, y a través de ese amor, la madre recogió a los más necesitados, a los más pobres de los pobres, tanto en lo material como lo espiritual.

También enseñó que cuando se ponía en acción el amor, nos sumergimos en una actitud de servicio, así como, nos invita a mirar más allá de nuestras necesidades, con una mirada fraternal hacia los demás, alejándonos de la indiferencia y nos anima para hacernos cargo de las necesidades ajenas viviendo la solidaridad hacia el prójimo.

Madre Teresa y su legado de vida para la beneficencia

Además de recordarnos el amor fraternal, la Madre Teresa de Calcuta nos enseño la importancia de darle sosiego al necesitado creando un cuerpo de monjas que compartían su vocación de servicio, enfocando toda su actividad en realizar obras benéficas, como también lograr la construcción de hospicios y residencias para los más desamparados, por ello la ONU en el 2012 declaró el 5 de septiembre como el Día Internacional de la Beneficencia, reconociendo el papel de la caridad a la hora de aminorar el sufrimiento humano. La beneficencia puede contribuir a la promoción de la solidaridad y de fomentar la empatía entre las personas, como también aliviar las carencias de los que viven en situación vulnerable.

En la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, se reconoce que la erradicación de la pobreza en todas sus formas y dimensiones es uno de los grandes desafíos que se enfrenta la humanidad, como también es indispensable para el desarrollo sostenible, y reconoce el papel importante que tienen todos los sectores de la sociedad para lograr su erradicación.

Los elementos esenciales planteados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (seres humanos, dignidad, planeta, prosperidad, justicia, y alianzas), tienen el potencial de transformar nuestra vida y nuestro entorno, a través de su armonización y de esta forma hacer frente a los retos que se enfrenta la humanidad.

También establece el marco referencial para que las instituciones que practican la beneficencia permitan a todas las personas contribuir al mejoramiento de nuestro mundo. Para la Madre Teresa, la pobreza y la angustia constituyen una amenaza a la paz.

Hermanos, hijos de un mismo Dios

El Día Mundial del Hermano se rinde así un tributo a estos familiares y también a aquellas personas que sentimos un gran afecto como si lo fueran, a esos hermanos espirituales que elegimos en nuestra vida, sabiendo que todos somos hijos de un mismo Dios, y contamos con esas personas que hemos elegido y nos han elegido para compartir nuestra vida.

Con los hermanos es natural sentir un instinto de protección y cuidarse mutuamente. Cuando un hermano se siente solo o está viviendo alguna dificultad, muchas veces basta una simple palabra, una llamada, una mirada o un gesto para llenar su corazón, y recordarles que no están solos. Aunque surjan desacuerdos, se gana una oportunidad de sacar provecho aprendiendo a perdonar, a compartir y a ser pacientes. El tener a alguien con quien compartirlo toda tu vida no tiene precio.

Entre hermanos se vive un vínculo atemporal, que se estrecha con más experiencias, y más vivencias en familia llenándonos de recuerdos que permanecen para siempre. Y por mucho que las circunstancias cambien, estando lejos o cerca, los encuentros serán siempre como la primera vez.

Celebrar la hermandad es festejar el darnos a los demás y agradecer la presencia de otras personas especiales con quienes compartimos la vida, y este sentimiento se unen los voluntarios, embajadores y colaboradores como Enrique Alberto Romero Domínguez, y  todos los que conforman la gran familia de la Fundación Alma Amiga, quienes hermanados ponemos nuestro granito de arena día a día para ayudar al prójimo que se encuentra en una situación vulnerable.

The post 5 de septiembre: Día Mundial del Hermano first appeared on Fundación Alma Amiga.

Ver Fuente